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27 de noviembre de 2011

Más alto, pero no más claro.

Y es que nadie lo entiende, nadie entiende cada vez que tiemblo al verte, cada vez que pienso la más absurda posibilidad de estar a tu lado, cada vez que maldigo todos mis parpadeos cada vez que apareces por el blanco de mis ojos. Que cuando me tocas se me pone la piel de gallina, cuando te ríes conmigo o de mí y te contesto con tal asquerosidad. Que siento frío y calor a la vez, que se me encoje el corazón y parece que se me sube hasta la garganta, si la garganta me va a doler alguna vez de gritarte lo mucho que te quiero, pero sabes? me da igual que tú a mí no, tengo amor para los dos ;)

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